Javier Duarte, Paolo Hazas e Interpol

El flechador
Manuel H. Naranjo

Paella de La Reina, lunes 7 de diciembre 2009. Cuando nacía la Verba Brava como medio impreso, mi hermano Toño Trujillo recolectó cualquier cantidad de información relacionada con bróker, defraudadores enquistados en dependencias gubernamentales de La Fidelidad; con fama de júniores y de drogadictos, protegidos desde la secretaría de Finanzas y Planeación del Gobierno del Estado, por El Delfín de la Voz de Niña y actual diputado federal, aspirante a la regencia del Santuario del Crimen Organizado, oficialmente conocido como Veracruz de Ignacio de la Llave, Javier Duarte de Ochoa, lo que cimbró a La Fidelidad.

Fernando Paolo Hazas Barragán, cuando encubría sus actividades delictivas fingiendo como sub director de Recursos Humanos en la secretaría de Finanzas y Planeación, casó con la hija de empresario periodístico de la Cuenca del Papaloapan, Enrique Haz, el 16 de mayo del 2007, en la playa privada concesionada a uno de los hoteles de 5 estrellas en Boca del Río, Ver.

Aquello, dicen los que saben de esto, era una triangulación armada por La Fidelidad, las influencias periodísticas y el poder financiero del Gobierno del Estado.

Los embaucados suman cientos, sobra quienes dicen que pueden ser miles y, que el monto de los daños patrimoniales, rebasa los 13 millones de dólares.

Cuando se desata el escándalo, Paolo Hazas huyó, empero, supuestamente la señora Haz de Hazas Barragán, sigue percibiendo integro el salario del ex prófugo.

¿Ex prófugo? Así es. No conozco el número de la casa, ni el nombre de las calles, donde se oculta en Córdoba, lo que si sé y, usted puede darlo por cierto, es que un grupo de investigadores de La Interpol, peinan Córdoba, Fortín y Orizaba, en la búsqueda de Paolo Hazas.

Algún tipo de arreglo debió tejerse en los altos niveles de la procuración de Justicia de la Nación, para que Paolo haya regresado a Córdoba, gozando de total impunidad.

Arreglos necesariamente a espaldas del presidente Felipe Calderón Hinojosa.

En la Sefiplan, era fama pública, que en un anexo del despacho de la secretaría de Finanzas, se habilitó una alcoba, donde presumiblemente en muchas ocasiones, los escoltas recogieron además de botellas de champagne Kristal, pequeñas bolsas de polietileno con residuos de lactosa y a lo mejor cocaína. Todo eso forma parte de las líneas de investigación que supuestamente Interpol y los grupos de Inteligencia Militar investigan ahora mismo.

En Sefiplan, nadie dijo, nunca, una sola palabra, por temor a las represalias.

Fernando Paolo Hazas Barragán, presumía además de la protección que Javier Duarte de Ochoa le daba, LA AMISTAD con el primogénito de Fidel Herrera Beltrán, Fidel Herrera Borunda. Eventual asistente, de las presuntas encerronas con niñas y con gay.

El asunto de la investigación va en serio. Mis veedores apuntan que ya tienen la punta de la madeja. Un rufián con serias dependencias, que no va a soportar dos patadas en los guevos y el ayuno obligado, cuando lo tengan metido en un separo o en un cuartel.

¿Les digo quién puede ser?

Ya. Está bien, no insistan, se llama Antonio, le apodan El Cucharas, es el jefe de Seguridad de la secretaría de Finanzas y Planeación; gracias a la Impunidad prohijada por La Fidelidad, supuestamente El Cucharas, también “le anda pegando al peligro”

La tarde-noche del 20 de noviembre, cuando aquel affaire en el zócalo de la Cuatro Veces Heroica Veracruz, que puso en evidencia que los esfínteres al Delfín de la Voz de Niña ya no le funcionan, uno de los invitados de honor al evento priísta, presumiblemente fue Fernando Paolo Hazas Barragán.

Le cuento

Le decía en la anterior entrega de El flechador, que las pruebas documentales de los presuntos ilícitos perpetrados por el Delfín de la Voz de Niña, integran cientos de expedientes.

Lo que comenta don Jorge Manrrique, es cierto, aparte del tráfico de influencias para favorecer a su suegro el tristemente célebre Tony Macías Yazergey, también están hurgando en los aspectos técnicos y legales, presumiblemente de permisos y financiamiento por cientos de millones de pesos, que Javier Duarte de Ochoa, inclinó en beneficio del empresario, hijo de Alfredo Hakim y Malena Santiesteban, Mikhail Hakim Santiesteban, presuntamente asociado con un pariente de primer nivel de Javier Duarte de Ochoa.

¿El papá de Karime?

Las cosas que pasan en La Fidelidad, por supuesto que son responsabilidad de Fidel Herrera Beltrán, uno de operadores, dice atinadamente “…Yo no conozco a un solo gobernador que no mande” que implica a Fidel como el que da las ordenes, “…Pero, lo que no se vale ---afirma--- es que Fidel, tenga que dar la cara por todo y por todos”

Eso tiene una explicación contundente, casi tangible, ninguno de los esbirros de Fidel Herrera Beltrán, va a aceptar la responsabilidad total de los turbios manejos de los recursos oficiales; ninguno de ellos quiere ser la segunda versión de Roberto “El Gallo” Palacios Solís; aquel que aceptó la responsabilidad total del peculado en la Junta Federal de Mejoras Materiales de Acapulco, Guerrero, de la que Fidel Herrera Beltrán era presidente. Fidel continuó su carrera política y El Gallo Palacios Solís, se quedó entrampado en el penal de Chilpancingo, Gro., mientras su esposa y los hijos en Ciudad Mendoza, Ver., estaban sumidos en la indigencia.

Fidel, ladrón y desmemoriado se olvidó de El Gallo al que presentaba como su hermano.

Pa’ que darle vueltas al asunto, la totalidad de la información documental en poder de Miguel Angel Yunes Linares, me consta, procede de adentro, de muy adentro de La Fidelidad.

En el trabajo de Manrrique hay un dato interesante, es un retrato hablado de la condición moral de Javier Duarte de Ochoa.

La fama pública menciona que por instrucciones de El Delfín de la Voz de Niña, Marcos Theurel Cotero, titular de la secretaría de Comunicaciones, pagó las obras a las empresas de Roberto Chagra Nacif, presunto propietario de la constructora Egrus, hermano de Milene (a) Mily Chagra Nacif, una de las amantes de Fidel Herrera Beltrán; la auditoría que pondría en claro los peculados cometidos por Chagra Nacif, respecto a que el cuñado incomodo de Fidel Herrera se llevó de la Secom 80 millones de pesos y que dejó sin pagar obras como la de la construcción del Circuito Vial: Avenida Universidad, Fraccionamiento Almendros, Colonia El Tesoro, en Coatzacoalcos, por un monto de 4 millones 800 mil pesos.

Para que no quede duda, el empresario defraudado presuntamente por Fidel Herrera Beltrán, Javier Duarte de Ochoa y Roberto Chagra Nacif, es Alberto Ladrón de Guevara, propietario de la empresa LINPROTEC NACIONAL S. A. de C. V.

El adeudo data desde el 2007, cuando Beto Chagra Nacif ordenó por conducto del ingeniero César Artemio Merino Espinoza, bajo contrato No. SC-OP-PE-028-2007-DGGE, la construcción del Circuito Vial.

Mis paisanos de Choliwood dicen que “no hay putos estables” y debe ser, las hormonas juegan bromas pesadas. El Delfín del esfínter dañado, es un deshonesto, su posición se la debe a una super aval, a Rosa Margarita Borunda de Herrera, en tanto los beneficios políticos y económicos, son para el cuñado y la amante de Fidel Herrera Beltrán, los hermanos Roberto y Milene Chagra Nacif.

Pa’ terminar, Egrus la constructora, de Chagra Nacif, está ubicada en el Boulevard Xalapa-Banderilla, digo, por checar el dato, ¿por qué los sabuesos de Interpol no la visitan, a lo mejor el que les abra la puerta sea Fernando Paolo Hazas Barragán?

La ñapa

Mañana le cuento las hazañas de la hija de Miguel Rolón, que en compañía de los júniores de Gata Chaca Corporation, perpetran en Choliwood, amparados por policías de La Fidelidad y militares.

Tranquilos, mañana les digo el sitio exacto donde se reúnen, para atascarse de, entre otras cosas, alcohol.

Tan, tan.

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